Salia, que tiene diez años, vive con sus hermanas, su mamá y su papá... pero no siempre pudieron vivir juntos. Tanto su mamá como su papá lucharon contra la adicción. Salia es uno de los 5,7 millones de niños estadounidenses que viven en un hogar en el que uno de los progenitores o ambos padecen un trastorno por consumo de sustancias. Para apoyar a las familias y a los niños afectados por la adicción de los padres, Sesame Workshop creó contenido y herramientas gratuitos que incluyen personajes favoritos de Sésamo, como Elmo, Abby Cadabby y su amiga Karli, una muppet de Sésamo de 6 años y medio cuya mamá está tratando de superar su adición. Los recursos, que son parte del programa Sésamo en las Comunidades, brindan las palabras que los niños necesitan escuchar más: No estás solo o sola. Alguien se ocupará de ti. La adicción es una enfermedad y, como cualquier enfermedad, las personas necesitan ayuda para ponerse bien. Y lo que es más importante: No es tu culpa. En cuanto a Salia, ahora que sus padres están en casa y en recuperación, su mamá y ella practican técnicas de afrontamiento, como la meditación, y Salia incluso les enseña a otros niños habilidades similares que le sirvieron para controlar sus emociones.
Atravesar los momentos difíciles es muy duro para las familias, pero, cuando los pasan, se sienten más fuertes.
-Salia, 10 años